Blogia
ModeradosdelSur

COMPAÑERO AAB

 

A usted también muchas gracias por haberme contestado.


¿Sabe amigo Don A. Nónimo, cuál ha sido la mayor victoria que les reconozco a este grupo de desacatados? ¡Nada menos que haberse apropiado de la palabra campo! Me imagino que es en ese punto donde usted más desata sus “bajos instintos”, porque campo es infinitamente más que soja, tanto que a cualquier criollo le duele semejante injusticia. De tal manera, cuando los medios dicen “el campo doblegó al gobierno”, en realidad cualquier argentino bien nacido leería “el sector sojero derrotó a su propia nación”. Con lo poco que conozco del “paño”, ya sé que andarán diciendo que reclamamos el choripán y alguna que otra prebenda, pero verá usted con qué cuenta sencilla queda demostrado que no es así.


Para que se sepa que nosotros también podemos hacer alguna cuenta, le digo que una nación en desarrollo, queda libre de tensiones sociales y dispuesta para generar el 80 % del producto bruto latino americano, cuando distribuye el 50% de su propio producto bruto interno, como retribución a los asalariados. Así fue nuestra querida Argentina hasta 1955 y repetido con un chispazo histórico después del 73. Para ser gráfico, me gusta decir que en esos años, quien trabajó 5 días, cobró 5. Pero veamos qué pasa cuando el valor real del salario baja al ¡20 % del PBI! Aquí alguien se quedó con un vuelto y en este nuevo marco el mismo obrero trabajó 5 días, pero cobró solamente dos. Supongo que alguien habrá sumado todos esos salarios caídos y el resultado es una suma varias veces superior a los peores momentos de la mayor deuda externa.


Queda demostrado que hay otras prioridades y que a eso lo podemos llamar una deuda más vieja con el pueblo. Digo nomás por fidelidad al principio de que “nadie se realiza en una comunidad que no se realiza” y si lo pensamos “todo en su medida y armoniosamente”, la soja puede esperar.


Muchos amigos de Gerardo son brillantes economistas y podrían encarar la tarea de redondear cuánto suman los salarios caídos en los últimos 50 años. Estoy seguro de que resulta una suma sorprendente. Otro interrogante a dilucidar es saber dónde fue a parar tanta riqueza robada, no sea cosa que la “alternativa democrática” que nos ofrecen desde la mesa de enlace esté compuesta por los que robaron o hicieron posible el robo.

 

Después de su sugerencia, prestaré atención al blog chacarero que usted me indica, aunque el modelo Ford t parece un poco viejo.


En su intención de compartir el pan, aprecio el antiguo principio cristiano que es parte esencial de nuestra idiosincrasia y por supuesto lo celebro muy agradecido.

Policarpo Cuaresma

 

0 comentarios