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ModeradosdelSur

MI DEBILIDAD DE PEQUEÑO BURGUÉS

Paso a admitir una de mis peores debilidades burguesas, la de denunciar al sistema, con la consecuencia negativa de que al mismo tiempo me denuncio. Con esa acción alivio mi angustia al calmar la voz de mi consciencia, pero quedo descalificado para otra función más importante. Es sabido que una acción vale más que escribir.

 Ya está hecho, ahora adelante. Pero de paso nótese el tic de prudencia y sigilo que nos quedó de los años de proscripción que soportamos las organizaciones del campo popular.

 La burguesía contraataca. Nunca perdió el poder, pero busca recuperar el control de los recursos de la superestructura del sistema.

 Al decir burguesía, estoy diciendo imperialismo y mafia, porque si se tratara solamente de burguesía nacional, eso en el caso de que existiera una burguesía nacional, no creo que cometiera un acto de suicidio. Quiero decir, se está ejecutando un plan que golpea duramente al gobierno nacional, pero que por elevación ataca al pueblo, como es natural. Una acción así ejecutada por la débil burguesía nacional, es lo que vendría a ser suicidio. Por lo tanto, no cabe pensar otra cosa que se trata de un acto de guerra imperialista asociado a la mafia. que alguna vez se la ha llamado sinarquía internacional. El enemigo que intentan doblegar, una vez más es la clase trabajadora, pero la lógica más elemental indica que el objetivo mediato también será la pequeña burguesía.

 Algunos sectores tilingos de la sociedad, profesionales liberales de nota, o comerciantes que explotan uno o varios locales comerciales de la calle Florida, pequeños industriales, alguno que otro empleado jerárquico, en suma el sector que consiguió ser dueño de una casa habitación, otra de veraneo y uno o dos automóviles están inquietos porque les empezaron a cobrar los impuestos que adeudan. Hablan de “gobierno confiscatorio”. Dado que también son propaladores de las opiniones que se cuecen en el caldero de las fuerzas de la sinarquía, en definitiva están siendo idiotas útiles.

 El imperialismo aprendió muy bien las enseñanzas de nuestro compatriota, glorioso comandante, que por mucho tiempo seguirá inspirando a los trabajadores organizados del mundo, en el sentido de abrir uno, diez, cien frentes de combate. Ataca por el flanco de los recursos naturales, agua, glaciares, petróleo, minerales. Pero no descarta hacer suyo el teatro de operaciones que son las ciudades, la superestructura del sistema y quedaría muy conforme si pudiera disparar el arma de la inflación económica. Para esto último, viste el ropaje de las organizaciones seudo revolucionarias de la izquierda colonizada y  montados en legítimas aspiraciones de los trabajadores, exasperan a la sociedad imprimiendo una virulencia desproporcionada a sus reclamos. Diga el lector, en qué concluye si observa que los representantes de la izquierda colonizada, continuamente disponen de los espacios de comunicación de la oligarquía. Diga también, por qué cree que grupos autodenominados trotsquistas o marxistas de preferencia eligen fustigar a reconocidos luchadores del campo popular, mucho más que a los culpables de gravísimos ilícitos contra el pueblo y aún más, culpables de traición a la patria. ¿Son solo coincidencias o es legítimo inferir un contubernio repugnante?  Señores tilingos ¿creen natural que en la televisión argentina, el ministro de justicia tenga menos espacio para comunicar su tarea, que la esposa del vivillo que con aire de predicador de cuaresma quiere hacernos creer que lucha por los jubilados y los desocupados?

 Hoy quiero dar una voz de alerta. Las escuelas de la Provincia de Buenos Aires están siendo objeto de una reparación y remodelación como nunca antes pude ver en mis casi treinta años de trabajar en algunas de ellas. También están siendo equipadas con toda clase de material, incluidas máquinas herramienta modernas en las de enseñanza técnica. Es muy grato comprobar que para los trabajos se recurre a pequeñas empresas de la zona, que prestan el mismo servicio de calidad satisfactoria, que cualquiera de nosotros hubiera podido contratar, cosa que aleja las suspicacias que se presentan con la vieja práctica de la subcontratación. A todas luces se trata de una experiencia que debería convocar, y seguramente lo hace, a todos los miembros de la comunidad educativa, para que se sientan motivados a defender esto que es una conquista de los trabajadores. Conquista que representa nada menos que la educación de sus hijos y un excelente camino para la movilidad social. Ahora bien, en medio de un período de intenso frío, al punto que mientras escribo esto está nevando en Buenos Aires como no ocurría desde 1918, la empresa distribuidora de gas ha cortado el suministro en varias escuelas, aduciendo deficiencias en la instalación, siendo que es el único medio de calefacción.

 He querido decir alerta, porque esta medida forma parte de toda una escalada dirigida a perder el espacio trabajosamente ganado. Frente a esto quiero recordar que “solo el pueblo salvará al pueblo” y recordar que “la organización vence al tiempo”.

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